miércoles, 20 de marzo de 2013
¡ACÁ ESTOY! Recen por mí…
Escribe MIGUEL ÁNGEL GIORDANO (Escritoriador, Argentina)
magiordanos@yahoo.com.aR
En la película “Mateo” (1932), dirigida por Daniel Tinayre, que tenía como protagonistas a Luis Arata (como Mateo,), Ada Cornaro, Enrique Santos Discépolo y José Gola, hay una escena donde Discépolo dice una frase que luego sería algo ya tradicional dentro del folclore urbano:
“¿Ese? ¡Qué va a ser ese si vive a la vuelta de mi casa!”.
La frase es una clara muestra de la idiosincrasia argentina.
Es que para triunfar o ser famoso en Argentina, primero debe ser consagrado en el extranjero. Es como si fuese una ley no escrita y lo sufren aquellos que han regresado al país cubiertos de gloria.
En su obra "Lo absoluto" (1865), el poeta español Ramón de Campoamor (1817-1901), decía
“En este mundo traidor, donde nada es verdad ni mentira, todo es según el color del cristal con que se mira”.
Nosotros (los argentinos), cuestionamos todo, como si nos doliese aceptar el triunfo, el éxito ajeno. Tal vez sea ese el motivo de tantos desencuentros a lo largo de nuestra historia, con tanta discordia y tanta sangre derramada en vano.
Yo no olvido que muchos “cerebros” tuvieron que emigrar. Que artistas, de todas las disciplinas se tuvieron que ir porque acá se los ignoraba. Tampoco olvido que el enorme René Favaloro terminó suicidándose ante la desidia de muchos compatriotas y de los políticos que siempre están mirando hacia otro lado cuando de cumplir con sus obligaciones se trata.
El Cardenal Bergoglio y ahora Papa Francisco no ha sido ajeno a esto y apenas se conoció la noticia de su designación, se alzaron algunas pocas voces de los detractores de siempre, fustigándolo.
Pero la inmensa mayoría de mis compatriotas, lo vieron como una señal de esperanza para nuestro pueblo y una bendición de Dios, que un sacerdote nuestro, que ha ofrendado su vida a la asistencia de miles de seres que se encuentran hundidos en la pobreza, sea ungido Papa.
Para nosotros, los argentinos, es un orgullo y una responsabilidad este halago, porque nos obliga a ser mejores seres humanos y no ensombrecer a la figura papal con nuestras desavenencias y nuestras mezquindades.
Su enfrentamiento con el matrimonio Kirchner es ancestral, porque tanto el ahora Papa Francisco como Néstor y Cristina no son de callarse la boca al momento de hacer vales sus ideas.
Si bien la familia Kirchner como Bergoglio, coinciden en las políticas para combatir la pobreza, es indudable que el Cardenal fue el “grano” que tuvieron en sus gobiernos los Kirchner y que ahora, merced al nuevo escenario político religioso, va tener que cambiar inexorablemente la actitud del gobierno hacia la iglesia. Por lo pronto, fue auspicioso el encuentro entre el Papa y la Presidente.
Nadie duda de que el purpurado argentino tenga carácter. Como dice el hermano Ricardo Corleto, (agustino recoleto) de paso por Roma, "es un hombre tan honrado y tan íntegro que ni siquiera el gobierno de los Kirchner pudo encontrar mancha alguna en su vida, a pesar de haberla buscado con suma diligencia".
Desde algunos sectores del actual gobierno argentino, se quiso contrarrestar el poder que de pronto obtuvo Bergoglio al ser nombrado Sumo Pontífice, con una vieja acusación sobre connivencia con la junta militar que gobernó cruelmente a nuestro país durante más de seis años y que dejó la triste secuela de 30.000 desaparecidos. Pero, tanto la justicia como algunos actores de aquel momento, aseguran que el actual Papa no ha tenido nada que ver.
Lo que sí es seguro y está sobradamente probado, es toda la inmensa actividad pastoral y de ayuda a los más necesitados que realizó el Cardenal Bergoglio. De él, por ejemplo, fue la idea de instalar una iglesia en cada “villa miseria o de emergencia” para evangelizar y estar más cerca de la gente que se encuentra descartada de un sistema cruel y desintegrador.
Es probable, que también haya una cuestión de “celos políticos” de parte de los gobernantes de turno ante la popularidad que obtuvo el actual Papa con su generosidad, su solidaridad y su lucha por los más necesitados.
Nadie olvida el duro cuestionamiento que hizo el Cardenal Bergoglio cuando el Padre José María Di Paola (más conocido como el “Padre Pepe”), Párroco de la iglesia Nuestra Señora de Caacupé, sufriera amenazas de muerte por ser uno de los firmantes de la declaración que veinte presbíteros firmaran denunciando el grave problema de las drogas y proponiendo algunas estrategias para solucionarlo. A través de una nota fechada el 23/4/2009, Cáritas Buenos Aires rechazaba enérgicamente las amenazas sufridas y precisaba: "todas las personas de buena voluntad que trabajan a diario por los pobres más pobres de nuestra ciudad, enérgicamente rechazamos todo tipo de amenaza como la que sufriera nuestra querido Padre Pepe -José Ma. Di Paola párroco de Ntra. Sra. De Caacupé Villa 21/24, adhiriendo a la declaración sobre la droga realizada por el equipo de sacerdotes para las villas de Emergencias de la Arquidiócesis de Buenos Aires".
En los últimos años, las declaraciones públicas de Bergoglio sobre los grandes temas sociales incomodaron a los gobernantes, porque trazaban diagnósticos sobre la niñez y la pobreza y remarcaba los alertas sobre el futuro del país. Hablaba de "los que caben en el sistema y los que sobran, por culpa de las contradicciones" y decía: “en la calle hay ‘niños esclavos’ y que la pugna política es la gran enfermedad de los argentinos".
Jorge Mario Bergoglio nació en la ciudad de Buenos Aires, en la tranquila calle Membrillar del barrio de Flores, el 17 de diciembre de 1936. Es el mayor de los cinco hijos del matrimonio formado por Regina María Sívori (ama de casa) y Mario (contador y empleado en el ferrocarril), ambos inmigrantes italianos.
Egresó de la escuela secundaria industrial E.N.E.T Nº 27 (ahora E. T. Nº 27) “Hipólito Yrigoyen”, con el título de “Técnico Químico”. A los 21 años (en 1957) decidió convertirse en sacerdote. Ingresó en el seminario del barrio de Villa Devoto como novicio de la Compañía de Jesús y culminó sus estudios como seminarista en el Seminario Jesuita de Santiago de Chile y se ordenó sacerdote el13 de diciembre de 1969.
Luego de una gran actividad como sacerdote y profesor de teología, fue consagrado Obispo Titular de OCA, para ejercer como uno de los obispos auxiliares de Buenos Aires.
El 3 de junio de 1997 es designado Obispo Coadjutor del Arzobispado de Buenos Aires y el 28 de febrero de 1998, al fallecer Monseñor Quarracino, lo sucede como Arzobispo de Buenos Aires, cargo que lleva añadido el título de Primado de la Argentina.
En 2001, el papa Juan Pablo II lo creó Cardenal y formó parte de la Comisión para América Latina, la Congregación para el Clero, el Pontificio Consejo para la Familia, la Congregación para el Culto Divino y la Disciplina de los Sacramentos, el Consejo Ordinario de la Secretaría General para el Sínodo de los Obispos y la Congregación para los Institutos de Vida Consagrada y las Sociedades de Vida Apostólica.
Por ser arzobispo de Buenos Aires era también miembro de la Conferencia Episcopal Argentina, de la que fue presidente en dos períodos consecutivos desde 2005 hasta noviembre de 2011, no pudiendo ser reelecto por no permitirlo el reglamento. Integró también el Consejo Episcopal Latinoamericano (CELAM).
NOTICIAS GENERALES (Para conocer el ideario del Papa Francisco)
Buenos Aires, 23/4/2009 - El Arzobispo de Buenos Aires y Primado de Argentina, Cardenal Jorge Mario Bergoglio, exhortó a miles de estudiantes a no dejarse atrapar "por la propuesta del atajo fácil, de la satisfacción al alcance de la mano, la propuesta del alcohol, de la droga, porque eso es tiniebla".
Además, recordó a la responsabilidad de la comunidad educativa en la defensa de niños, adolescentes: "Salgan del encierro, y vayan y anuncien este modo de vida, este modo en que la luz es la que vence, este modo en que no se negocia la luz por un farolito así nomás, que deje a su costado espacio de tinieblas".
El Arzobispo también resaltó que "estas tinieblas son tan poderosas que ayer uno de los sacerdotes firmantes de ese comunicado fue amenazado, y sabemos que estas amenazas no son chaucha y palito, no sabemos en qué van a terminar. Vos hablas, denuncias una tiniebla que es ofrecida por los mercaderes de las tinieblas en las puertas mismas de los lugares donde están los chicos y te viene la amenaza".
“El trabajo consolida la paz social”: El Arzobispo Bergoglio, señaló durante la Misa que presidió con ocasión de la popular fiesta de San Cayetano en la Catedral metropolitana que "el trabajo es el que consolida la unión familiar y la paz social".
Ante decenas de miles de fieles que en Argentina han convertido a San Cayetano en el santo patrono del pan, el trabajo y la equidad, el Purpurado señaló que "ustedes han venido aquí para proclamar la dignidad contra toda esclavitud y clientelismo y para reconocer el valor de la familia y de la paz social".
Luego de insistir en que "con trabajo no somos clientes de nadie, ni esclavo de nadie", consideró que "es importante que se trabaje para que haya trabajo y se pida trabajo".
De la Misa participaron importantes actores sociales argentinos como la Vicejefa del Gobierno porteño, Gabriela Michetti, y Raúl Castells, líder del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIDJ).
“Rompan esquemas artificiales y tendrán libertad”: En un mensaje improvisado, el Cardenal Jorge Mario Bergoglio alentó a los participantes de la 18° Marcha Juvenil a vivir el amor y la libertad ya que "Jesús te da la libertad ¡Rompan los esquemas y tendrán libertad!"
“Seguir a Cristo implica romper esquemas", dijo el Arzobispo de Buenos Aires y resaltó la participación de los jóvenes en el evento: "mientras algunos dormían, ustedes ya estaban caminando. Mientras algunos por ahí estaban reunidos viendo cómo podían hacer para poder tener más dinero, más poder, o más influencias, ustedes estaban diciendo que el Amor es Servicio; y que lo único que vale en la vida es vivir para los demás".
"Lo que ustedes estaban gritando con su modo de ser, es que el que no vive para servir no sirve para vivir. ¡Estamos cansados de gente que no sirva para vivir! ¡Nosotros queremos vivir para servir!".
“Lo que nos toca hacer es romper los esquemas artificiales que nos quieren imponer, romper los esquemas artificiales de un mundo fácil que nos vende la 'fácil', y subrayó la necesidad de rechazar estas propuestas y decir: No. Yo quiero seguir al Amor. Y el Amor es Servicio. Y el Amor no es hacerla fácil; el Amor es difícil. Ustedes lo saben, chicas y muchachos, que el Amor es difícil".
Finalmente, señaló a los jóvenes que "Jesús lo único que hace es romper los esquemas artificiales". "¡Vamos por el Amor, Vamos por la libertad! Vivan el Amor! ¡Rompan los esquemas y tendrán libertad¡"
El Cardenal Bergoglio exhorta: "Eso les pido, siembren de esperanza la Ciudad. Que sean ustedes canales, instrumentos, para que el Espíritu Santo vaya introduciendo a cada hombre, a cada mujer, a cada chico, a cada chica, en el misterio de Dios. Nuestra Ciudad lo necesita. Nuestro barrio lo necesita. Nuestras familias lo necesitan. Nuestros círculos de trabajo lo necesitan. Todos necesitamos eso. Y bueno, esta es la tarea para la casa, los deberes para este año".
"Educar, un compromiso compartido": El Arzobispo de Buenos Aires, Cardenal Jorge Mario Bergoglio, desafió a los maestros católicos argentinos a trabajar en una nueva educación que sea fruto del encuentro con Dios y que permita a los jóvenes descubrir el sentido de la vida y dijo:
"en la ayuda para que nuestros hermanos encuentren una respuesta también nosotros encontraremos renovadamente el sentido de toda nuestra acción y el gozo de nuestra vocación, el lugar de toda nuestra oración y el valor de toda nuestra entrega".
SUS OBRAS:
1982: Meditaciones para religiosos.
1986: Reflexiones sobre la vida apostólica.
1992: Reflexiones de esperanza.
1998: Diálogos entre Juan Pablo II y Fidel Castro.
2003: Educar: exigencia y pasión.
2004: Ponerse la patria al hombro.
2005: La nación por construir.
2006: Corrupción y pecado. * Sobre la acusación de sí mismo.
2007: El verdadero poder es el servicio.
2010: Sobre el Cielo y la Tierra.
2012: Mente abierta, corazón creyente.
Considerado el “auténtico heraldo de la perfección cristiana”, Francisco Bernardone, hijo de un rico comerciante y más conocido como San Francisco de Asís, a los veinticuatro años se despojó de riquezas, ambiciones y orgullo para abrazar el ideal evangélico de humildad, de pobreza y de castidad y se dedicó a ayudar a los enfermos y a los pobres.
Un día le pareció oír una voz desde el crucifijo que decía:
“Vete a restaurar mi Iglesia, que está en ruinas”.
Y ahí fue Francisco a “misionar” por el mundo llevando el mensaje evangélico de “Paz y Bien”.
Para poner orden en “su propia casa”, redactó la segunda “Regla” que fue aprobada por el Papa Onorio III.
Autor del Cántico del Hermano Sol, San Francisco fallece el 14 de setiembre de 1224. En 1939, el Papa Pío XII lo reconoció oficialmente como “el más italiano de los santos y el más santo de los italianos”, proclamándolo “Patrono principal de Italia”.
“PARA VIVIR NECESITO POCO Y DE LO POCO QUE NECESITO, LO NECESITO POCO".
San Francisco de Asís
En la ciudad de Buenos Aires hay muchas iglesias y a todas ellas iba a dar misa el Cardenal Bergoglio. Las más concurridas son la de San Cayetano (Patrono del Trabajo), donde los fieles quince días antes hacen fila para ingresar, el Santuario de Santa Rita (La Santa de los Imposibles), adonde el ahora Papa Francisco, iba todos los días 22 a celebrar misa y la últimamente muy visitada Iglesia de San José del Talar, donde está la Virgen de los “Desatanudos”.
Le gusta dar misa en la Catedral de Luján, donde les habla a los más del millón de jóvenes que todos los años hacen la tradicional peregrinación a pie.
Los fieles de Argentina - en especial aquellos para quienes les era muy habitual ver al Cardenal Bergoglio, antes y después de ser Arzobispo -, dar misa y estar con ellos, tienen una inmensa alegría por verlo al frente del Vaticano, pero por otro lado, sienten tristeza porque saben que nunca más podrán tenerlo cerca, conversar con él y escuchar sus palabras de alivio espiritual, sus didácticas homilías e, incluso, que el ahora Santo Padre, les lave sus pies.
Es que una de sus características principales, que son el asombro del mundo entero, para los argentinos era nuestro pan diario. Lo suyo no es una postura marquetinera. Él es así. Está en sus genes y en sus principios como religioso y también, como hombre que transita por la vida.
El mundo asiste a toda una catarata informativa sobre sus costumbres y se sorprende porque haya pagado una cuenta de la pensión o que viaje en el autobús.
Para quienes lo veíamos a diario viajar en el colectivo, en el subte y en los trenes para ir al Arzobispado o para ir a dar misa a 30 o a 100 kilómetros de la ciudad, o adonde sea, era la confirmación, la ratificación de sus principios, éticos, morales, espirituales y religiosos.
Jorge Mario Bergoglio, hoy Papa Francisco, ha sido y es coherente con sus firmes atributos.
Muchas veces pedimos que los ejemplos los tienen que dar nuestros mayores y la mayoría de las veces eso no ocurre. El Papa se muestra al mundo tal cual es y con sus pequeños-grandes ejemplos, nos está indicando el rumbo a seguir. Nos está diciendo: “Hermanos, basta de tanto materialismo inútil. Unámonos en la fe, en la espiritualidad y juntos mejoremos nuestro estilo de vida. Dignifiquémonos”. (N. A.: Éstas son palabras mías, no del Papa).
Breviario:
* Al Cardenal Bergoglio antes y durante su Arzobispado, se lo podía ver con su valijita en las paradas de colectivos, esperando en la fila como cualquier persona común. Los habituales pasajeros conversaban con él y, muchas veces, confesó a varios de ellos durante el viaje.
* Las actitudes del Papa Francisco que sorprenden al mundo van a ser comunes dentro de poco tiempo. Cuando era Arzobispo, le encantaba ir a dar misa en la Plaza Constitución, cerca del centro de la ciudad de Buenos Aires. Allí se reunían los fieles más castigados: vagabundos, cartoneros, prostitutas, delincuentes y aquellos que nada tienen, pero que encontraban en sus palabras, una luz de esperanza.
En una ocasión, en que visitaba la iglesia que él había creado en una de las tantas “villas”, un hombre se le acercó y le dijo que lo respetaban porque él era uno más de ellos.
* “Que Dios los perdone por lo que hicieron”, les dijo a los Cardenales que lo eligieron en la cena posterior a su proclamación.
* Un joven español soñó el 11 de febrero que renunciaba Benedicto XVI y que en su lugar asumía Francisco. Esa premonición se la contó a su novia y ella la subió de inmediato en su Twitter.
El Cardenal Bergoglio desciende en la estación Perú, del subte de la Línea "A" (con los vagones de 100 años, recientemente cambiados por los modernos), yendo hacia la Catedral de Buenos Aires para dar misa.
“Es tan humilde que a uno le da vergüenza”
Mi esposa Elena se recibió como Catequista en el Seminario Metropolitano de la ciudad de Buenos Aires. Su vocación de servicio y sus actividades “ad honorem” durante años, sobre todo en el “Santuario de Santa Rita”, le valieron el reconocimiento de propios y extraños.
Sus estudios en el Seminario más varios cursos y “retiros” junto al Cardenal Bergoglio y otros representantes de la iglesia, más su acercamiento hacia los pobres y desvalidos, hizo que fuese recomendada para organizar y dirigir “Caritas Santa Rita”.
Durante años llevó adelante una titánica obra comunitaria por la que recibió el cariño de los necesitados y la consideración de las máximas autoridades.
A ella se la respeta por todo lo que ha hecho en favor de los indigentes y necesitados y porque, a pesar de que nuestra familia tiene las necesidades de la mayoría del pueblo, nunca “usó” su cargo para beneficios propios y tampoco le pidió nada al por entonces Cardenal Bergoglio ni a sus más cercanos colaboradores, que son amigos de ella desde hace más de 25 años.
Sus grandes conocimientos de la religión, más su gran capacidad para llevar adelante obras comunitarias, siempre se han hecho en silencio. Ella es mi gran amor y la madre de mis hijos y es la primera vez que hablo de estos temas. Pero creo que es necesario que se sepa un poco de algunos rasgos de su trayectoria. Tal vez y en este momento de euforia religiosa colectiva, sirva para crear conciencia en aquellas personas que pueden hacer lo mismo que ella y que aún no lo saben de qué logros y obras pueden llegar a concretar en favor de la humanidad.
Uno de los amigos de mi esposa, que es el "Coordinador a cargo de la Vicepresidencia. de Cáritas Buenos Aires”, en ocasión del “Retiro Anual 2012”, decía: “En el Año de la Fe, nos proponemos ofrecer a todas las personas que trabajan en las distintas áreas de la pastoral parroquial y arquidiocesana, la posibilidad de tener una jornada espiritual con nuestro padre y pastor, ya que sentimos que es un servicio que desde Cáritas podemos brindarle a la Iglesia”.
La invitación fue para los integrantes de Cáritas Buenos Aires que trabajan en diferentes iniciativas como comedores, refugios nocturnos, micro emprendimientos, entre otros, y para todas las personas con vocación de servicio que tienen la responsabilidad de acompañar y animar procesos de transformación en comunidades donde la desigualdad de oportunidades genera exclusión y pobreza.
En esa ocasión, el Cardenal Bergoglio (como Presidente de Caritas), hizo dos meditaciones por la mañana, seguidas de momentos de reflexión personal. Hubo tiempo de adoración eucarística y para la meditación y la reflexión. Finalmente, se celebró la Eucaristía.
Esa fue la última vez que mi esposa estuvo junto al ahora Papa Francisco y donde él tuvo la delicadeza de mantener una fluida charla que la enriqueció enormemente.
El nombramiento de Bergoglio como Papa, fue de gran emoción para mi esposa porque ha estado cerca de él trabajando en la Evangelización, en la Oración y en la ayuda a los hermanos que sufren. Lo ha conocido bastante y, aunque sabe que nunca más va a poder tener esas conversaciones tan enriquecedoras, está convencida que es lo mejor que le pudo pasar a la iglesia en éstos momentos de incertidumbre. Ella dice: “el enorme espíritu de Jorge Mario Bergoglio, va a obrar para que las cosas cambien positivamente, En Argentina y en toda América, se viven momentos históricos y plenos de alegría”. Y agregó: “La iglesia, la fe y la ayuda humanitaria, se van a potenciar a partir de ahora, con un Papa que priorizará a los pobres y que hará un cambio rotundo en la administración de las cuentas del Vaticano, como ya lo ha hecho con las cuentas del Episcopado Argentino”.
Finalmente, dijo: “Es tan humilde que a uno le da vergüenza. Para él, lo importante es ‘compartir’ el amor que Dios nos da. En una ocasión, hablé con Bergoglio respecto al mal comportamiento de un Párroco hacia los pobres, a quienes desatendía y no los escuchaba. Le pregunté qué podíamos hacer porque yo me sentía herida por esas actitudes. El ahora Papa Francisco, me dijo que tenía que ser paciente con las actitudes de los hombres. Dios pondrá las cosas en su lugar y que, seguro, tenía un lugar reservado para mí. Y así fue. Con el tiempo, ese cura fue desplazado y luego renunció y yo fui nombrada Directora de Caritas Santa Rita”.
El Cardenal Bergoglio, Papa Francisco, no solo es un hombre de fe sumamente instruido, capaz, inteligente, que habla fluidamente español, latín, italiano, alemán, francés e inglés, que es profundamente espiritual y con una sólida personalidad, sino que también, es un hombre de carácter y de firmeza muchas veces confirmada, virtudes éstas que le respaldarán a la hora de meter en caja a quien corresponda o de reformar en profundidad a la Curia romana.
Por lo pronto, ya lo ha “sufrido” el Cardenal Bernard Low acusado de proteger a más de 250 curas pederastas entre 1984 y 2002, tiempo en el que estuvo al frente de las diócesis de Boston (Estados Unidos) y a quien el nuevo Papa le ha solicitado que abandone el Vaticano.
Como San Francisco, el flamante Sumo Pontífice parece revivir aquellas palabras que pareció escuchar San Francisco de Asís: “Vete a restaurar mi Iglesia, que está en ruinas”.
Los que conocemos a Bergoglio, sabemos que es una persona decidida, de los que no le tiemblan el pulso a la hora de tomar decisiones, esta "limpio" y posee las agallas necesarias para terminar la limpieza que no pudo o no le dejaron hacer a Benedicto XVI : el IOR, el Banco Vaticano y la Curia.
El nuevo líder de la Iglesia Universal comenzó a mostrar el “cambio” desde el mismo momento en que fue anunciado al pueblo quién era el sucesor de Ratzinger. No solo es el hecho de ser el primer religioso del “Nuevo Mundo” (América) y el primer Jesuita en ser nombrado Papa. Son los detalles pequeños que se transformaron de pronto en grandes, los que manifiestan esa actitud de cambio.
Fiel a sus principios, Bergoglio rechazó los oropeles y toda pompa y circunstancia. Pidió una plegaria por su antecesor y luego le pidió (como lo ha hecho a lo largo de su vida), un ruego por él y su pontificado, inclinándose ante la muchedumbre. Por estas tierras, muchos estamos seguros que de haber tenido espacio, se hubiera arrodillado en el piso.
Si el lector lo desea, puede ver nuevamente esas primeras imágenes y va a notar que el cardenal que se encuentra a su izquierda, lo aplaude y con cara de sorpresa, inclina la cabeza. En otras imágenes, se lo puede ver sonriendo inocentemente con las actitudes del nuevo Papa.
Pero las imágenes más potentes y donde se muestra que “todo empieza a ser diferente”, son dos momentos de ese día: cuando aparece ante el pueblo. Bergoglio, primero saluda levemente con su mano y luego se queda estático mirando a la multitud con los brazos firmes al costado del cuerpo. Esa es la postura que yo interpreto como que el nuevo Papa está diciendo: “AQUÍ ESTOY”. (Las mismas palabras que dice Moisés cuando Dios lo llama)
El otro detalle, es que con esa actitud, de mirada fija y firme hacia el pueblo, indica que “está escuchando”. Y escuchar, para los que lo conocemos en Argentina, es una de las características más notables de Bergoglio.
Luego, como si fuesen sus vecinos del barrio, dice: “Buona Sera”.
En ese preciso instante, demolió todas las estructuras formales y se “metió a la gente en el bolsillo”.
Con el correr de las horas y de los días, siguió dando muestras de su sencillez y humildad, cosa que ratificó cuando dijo el porqué del nombre elegido: Francisco, en alusión a San Francisco de Asís.
Por otra parte, ya les está dando grandes dolores de cabeza a las fuerzas de seguridad vaticanas encargadas de cuidarlo. Los que lo conocemos, sabemos bien de su total independencia para manejarse en cualquier ámbito en que se encuentre.
Esas son las marcas indisolubles de éste hombre, que hoy revoluciona al mundo.
Un mundo que necesita de un cambio total, más cerca de lo humano, de lo espiritual y alejado del materialismo feroz.
Un mundo que ve en el papa Francisco, esa luz de esperanza de un mundo mejor por el que venimos anhelando desde muchísimo tiempo.
Francisco o Bergoglio, solo pide que recemos por él. Algo muy escaso a cambio de todo lo que puede llegar a darle a la humanidad entera.
Que así sea.
(FUENTES: El material propio estuvo enriquecido por: http://www.aicaold.com.ar/index2.php?pag=obbergoglio * http://www.americalatina.va/content/americalatina/es/noticias-destacadas/la-espontaneidad-de-francisco.html * http://www.periodistadigital.com/religion/vaticano/2013/03/11/jorge-mario-bergoglio-el-nuevo-roncalli-iglesia-religion-papa-juan-nuevo-buenos-aires.shtml * http://www.26noticias.com.ar/la-increible-historia-del-espanol-que-predijo-el-nombre-del-papa-167617.htmll * http://www.caritasbsas.org.ar/comision.htmll )
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